32.000 OPERACIONES MILITARES EN 16 MESES CONTRA LA MINERÍA ILEGAL.
Boletín N° 115
15 de Mayo 2025
LOS GOLPES CONTRA ESTAS MAFIAS SE INTENSIFICAN
La minería ilegal no es solo un crimen ambiental, es un fenómeno que también engloba explotación laboral, evasión de impuestos, lavado de dinero, extorsión, violencia, secuestro y, lo más grave aún, financiamiento del terrorismo. Combatirla significa cortar el flujo de dinero sucio que alimenta a las bandas criminales, recuperar territorios tomados por mafias y devolver la tranquilidad a comunidades que han vivido bajo constante amenaza. En esta guerra, Ecuador no se rinde, y desde el inicio del gobierno del presidente Daniel Noboa Azin, la lucha contra la minería ilegal se ha intensificado de manera decidida.
Desde enero de 2024 hasta la fecha, las Fuerzas Armadas han realizado un total de 32.000 operaciones militares contra la minería ilegal. Este esfuerzo ha representado casi una de cada 10 misiones militares en todo el país, todas centradas en desmantelar estructuras criminales ocultas en nuestras montañas, selvas y ríos. Como resultado, se han destruido 429 bocaminas, 231 retroexcavadoras y casi 50 dragas inhabilitadas, además de miles de herramientas, explosivos y maquinaria pesada incautada.
Pero más allá de las cifras, cada una de estas operaciones significa menos oro para las mafias, menos armas para los sicarios y menos miedo para las familias ecuatorianas. Además, hemos golpeado a las mafias en su fuente de financiamiento. Solo en estos 16 meses, hemos decomisado con más de 660 millones de dólares, dinero que estaba destinado a financiar asesinatos, secuestros, tráfico de armas, drogas, destrucción ambiental y, lo más grave, el terrorismo.
Esta guerra también tiene un alto costo humano. Más de 1.000 soldados se encuentran desplegados cada día en esta lucha. Once de ellos, en Alto Punino, entregaron su vida combatiendo con honor a aquellos que pretenden someter al país a través del terror. Su sacrificio no ha sido en vano. Su valentía es un recordatorio de lo que está en juego en esta batalla.
Los principales blancos de estas operaciones han sido las organizaciones criminales Los Lobos, Los Tiguerones, las disidencias de las FARC, y otras mafias que, mientras destruyen nuestros ecosistemas, intentan tomarse zonas estratégicas como Esmeraldas, Imbabura, Carchi, Sucumbíos, Azuay y Zamora Chinchipe. A pesar de ello, el objetivo es claro: recuperar el control territorial y restaurar la legalidad en estas áreas a través de estrategias, equipos humanos y logísticos detallados en comunicaciones anteriores desde esta Cartera de Estado.
Atacar la minería ilegal no solo es una medida contra el crimen organizado; es una acción esencial para devolver la seguridad a las comunidades, frenar la destrucción de nuestros ríos y bosques, reducir el poder económico del narcotráfico y restaurar el control del Estado en territorios tomados por el crimen. Cada operación realizada abre camino al desarrollo, a la legalidad y a la paz que los ecuatorianos merecemos.
En los últimos días, 1.500 nuevos efectivos se han sumado al frente en la zona de Alto Punino, reforzando el control territorial y blindando al país con una estrategia firme, coraje y acción decidida, bajo el liderazgo del ministro de Defensa Nacional, Gian Carlo Loffredo.
La lucha contra la minería ilegal es una de las prioridades más altas de este gobierno. El compromiso con la defensa de la vida, el ambiente y la soberanía no es solo una opción, sino un deber inquebrantable que seguiremos asumiendo con responsabilidad y fuerza. Esta lucha no se detiene, y seguiremos enfrentando con determinación a
quienes intentan destruir nuestro territorio y amenazar la paz del Ecuador.